domingo, 17 de enero de 2010

Cuando le viene el hambre pinta to lo que quiere comer...


Algunas veces
me suben la fiebre los termómetros
y salgo de la calle
para respirar un rato
el humo que te invoca.

No es del todo cierto
que exista la tristeza en el amor,
existe el sueño,
ese instante
en el que se dan por vencidos
los párpados del verso.
En los que el río
no se descongela
por mucho que agosto
lo pellizque.

Tampoco es cierto que sea eterna la tristeza.
Pero sí lo es el sueño,
el más profundo,
el que empieza hasta acabar en el principio,
el tuyo,
el nuestro,
el de los olvidados que siempre se recuerdan.
El que huye.

A todo esto
no me llama el cuerpo a recorrerte,
porque tengo el corazón
fuera de cobertura y sufrimiento,
entre las nubes que volvieron del Levante,
y las que aguardan en Gredos como almohadas.

Estoy de viaje
hacia el traslado del invierno,
y el amor es un utensilio
de poca utilidad en estos casos.
Porque corta.
Pero aún así,
siento con el alma que me prestan
los corazones que hay grabados en los bancos
que encierran nombres
que ya no nombran nada,
sobre los que se sientan
a peinarse
las promesas aparcadas.

Siento que tú y yo
podemos recoger los corazones
que abandonan estos pobres peregrinos
que no saben quererse
sin faltarse,
que no arañan,
que no se han esforzado en olvidarse.

Y así,
después de no ser sólo nosotros
sino ellos,
mirarnos desde fuera
como hacen
los depredadores de conciencias
y eclipsar nuestro naufragio
con minúsculas frutas que sean besos.

Porque si yo estoy lejos de ti,
tú no puedes estar cerca
si hay distancia.
Y lo cierto es que la hay,
muy montañosa.
Pero si todos
y cada uno de los corazones
se separan como aguas del mar Rojo
(es decir, sangre)
y se alejan.
¿Cómo ocurre que me pinchas el regazo?

Porque podemos separarnos sin distancia.
Porque podemos alejarnos y estar cerca.

Quizá algún día te sientes a mi lado
en este banco,
te sientes a mi lado
y estés lejos
(sin distancia)
y me digas que este poema
no debí escribirlo yo,
sino nosotros.

Quizá algún día
mi casa no sea una nube
ni una calle paralela a tus abrazos,
sino un corazón
tallado a escoplo encarnizado
en cualquier banco de la plaza,
un corazón que no es como un poema,
que se escribe en conjunto y soledad,
un corazón que se dibuja,
que es de cualquiera hasta que apaguen
la muesca de su vida.

Pero por suerte sé que estos pensamientos
no son más que nada condensada,
líquenes,
ganga,
tropezones,
espuma que me afeita la ilusión.

En el fondo, sé que existe un lugar que te acompaña,
en el que no estoy censado,
pero vivo.
[H&C]




Que llena el breve espacio en que no estás...
Con todas estas letras participo en el concurso del Claudio.

martes, 12 de enero de 2010

Otro que huye...



A veces salgo a correr
sólo para despejarme
para no sentirme atrapado

Me gusta pensar
que corro hacia algo
o que algo trata de atraparme

Algunas veces la gente me mira
seguramente pensando que huyo
y es normal

De pronto el camino gira
como una enorme serpiente
y me come

Es entonces
cuando no vuelvo a ver
a todos los que me juzgan
Me hago infinito
y desaparezco

Aunque ninguno tenga cara
todos ellos existen
y me buscan en el sendero
pero yo se que no podrán encontrarme
para ellos sólo soy..
...

otro que huye....................


(S)

viernes, 8 de enero de 2010

Y se agarra a su tabla de náufrago... volviendo a su eterna canción...


Dice que ha fracasado...
porque no llegó el primero a donde todos han llegado
Dice que no ha triunfado...
por haber devuelto todo de lo que todos le han dado
Dice de la vida y sus hallazgos
lo que se puede ver y oír sin acercarte
pero que sólo se siente
cuando estás al lado.
Dice que hace buen día
si se dobla el sol en un orujo añejo.
Dice que el tiempo pasa
pero de largo.
Cuenta todo lo que sabe del misterio.

Dice que es poeta...
para andar por tu jardín sin abrocharse la bragueta.
No dice te quiero...
porque mentir es pecado y él quiere ir al cielo.
Él dice que allí... si puede ser el primero.

No cree en Dios ni en el hombre...
porque el mundo no tiene nada que ver con ellos.
Que no hay día que termine sin un hombre
que por otro hombre haya muerto.

Dice que añora todo aquello que recuerda...
porque el olvido es más triste que el más triste recuerdo
...

que te vendo una sonrisa que vale más que el dinero.

Que no hay ciudad ni amor que caminando no te pierda.

Que las nubes huelen a...

(algo que no recuerda)

Dice que no es sensato
pensar tanto en ti,
cepillarme bien los dientes,
ganarme la vida
para malvivir.

Habla y habla sin sentido...
y acaba por hablar de mí
[H&C]

Nunca supe templar la guitarra que embrida mi potro...
cuando el dealer me dijo que sí, no le dije que no...
la hormiguita murió... la cigarra se casó con otro...
yo aposté por las fichas caídas de tu dominó...



Vendí en Portobello los clavos de mi cruz... brindé con el diablo a su salud.
Mi manera de comprometerme...

lunes, 4 de enero de 2010


En mi casa hay un árbol
largo y verde como su vida

Tiene fuerte el tronco
pues allí guarda sus recuerdos

Cada rama simboliza
todo lo que ha pasado

Entre todas cuentan una historia
basada en sus raíces

..........Cuantas penurias han luchado............Los manantiales de los que han bebido
.................vientos, mareas, sal.............................de pureza sincera, virgen

..........Se han perdido tantas hojas..................El sol y sus regalos de oro puro
..........que no merece la pena recordar..... ..ahuyentando el miedo y el mal humor

Tan difuso su futuro
Quizás secarse y arder

Volverse de nuevo humo
Dar resguardo a quien lo necesite

(S)

viernes, 1 de enero de 2010

Sube conmigo a la acera...


Hemos terminado
de vivir lo que nos tocaba
y el resto es de propina.
Los barcos son de lluvia en la bañera,
nos da la espalda el tiempo que te espera,
y el infinito
tiene un estanco en la esquina.
Debemos dejar a un lado cosas laterales,
mirarnos a los ojos sin cristales
y hacernos reír de risa sin quererlo.
Tantos llantos saben lo que cuesta hacerlo...

Abrazos sin permiso,
regalos viejos.

Nos saben hoy a polen los silencios,
los besos deshechos en los labios
con sabor a pólvora talada,
las muecas,
el amor contráctil de la infancia,
el rostro enharinado de las nubes.
Podemos seguir los pasos de los solos
con el sudor del aire en las pestañas,
resbalando hasta pisar bajo nosotros
la espuma de la playa.
De no ser parecidos a la noche...
nada nos salvaría de acabarnos.
De apagar la vela que sostiene como un mástil
el impulso de los años.
Nada nos salvaría de rellenar un espacio.
De recubrir la soledad de las aceras,
de hablar sin palabra darnos...
de recorrer el trayecto
hasta morir perfectos y acabados...
hasta acabar perfectamente muertos...

Desde hoy hasta que alcances,
extrae la mena dulce de las cosas.

Cualquier cosa que digas empieza una nueva historia.

Cualquier cosa que aprendas...
podrás utilizarla en nuestra contra...
cualquier cosa que entiendas...
podrás convertirla en otra.
Cualquier momento que tengamos
podremos despeñarlo entre las rocas.

Viajeros todos juntos, quietas las ciudades.
Duérmete conmigo.
Sin ti nadie sabe.

Agárrate a las alas del espejo
no sea que por verte despistada
te arrastre el mar a tierra de misterios
sin nada que objetar a la ignorancia.
Quizá...
nos quede tiempo en blanco
y cuando amanezca ya no sea mañana.
Tal vez podamos encontrar la gloria
sumida en esta tierra enmascarada
luciendo entre la arena entrecerrada
como una perla inútil sin su ostra.
[H&C]



Te mereces un novio poeta. De los de verdad.