espejos que se olvidan de sí mismos,
conciencias desgarradas con anginas,
perplejos alquilando catecismos.
Limosnas de perpetuos onanismos,
compotas de paciencia y aspirinas,
cadáveres con frac en las esquinas,
futuros destronados por abismos.
Tú y yo saliendo de la facultad,
escayolando nuestra libertad
con este poco de pasión que queda.
Avanzo y pienso en ellos y me siento
acariciando en cada movimiento
la panza del león que los depreda.
[H&C]