Óyeme fundir futuro en tus encías,
renacuaja,
túmbate a la sombra de mi pánico
a cruzar la carretera
sin nadie que me espere al otro lado.
Sin nadie que sonría
aunque las flores maten al fotógrafo
con su olor a platos sucios.
Sin nadie que elimine
la posibilidad de morir
inadvertidamente,
inútilmente,
como cruje un tablón en el pasillo.
Acaríciame
con la luz brillante
que hunde tus pestañas
y te resguarda
interrumpida
donde nunca llega hoy
a ser mañana
cuando se pone el sol sobre las tejas
y quema las bisagras de los días
sin que quepa ni un rayo entre nosotros.
[H&C]
Tal vez te arañe el corazón... no hay más motivo ni razón que me acordé de ti.
4 comentarios:
He llegado aquí de casualidad y me encanta todo lo que acabo de leer, es un placer encontrar cosas tan bonitas sin haberlas buscado.
Felicidades por el blog
Bello... muy bello. Me encanta lo de "tumbate a la sombra de mi pánico"
Qué decirte,
flipo.
Besos
Sin que quepa ni un rayo entre nosotros.
(Si vuelvo a discutir sobre incoherencias te dejo que me tapes la boca) Que tenemos que ir hacia adelante, querido.
Me da por pensar que nací cangrejo. No sólo por ir hacia atrás, sino porque te quito el aire del pecho si me besas.
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