Cuando me coloreas
de este gris
eres un tanto injusta.
Te fijas sólo
en cosas que la belleza no repara.
Los muslos insumisos,
las puertas hoscas,
los instantes que no se viven.
Y las cartas
que dejan boca arriba
los muchos que nos faltan.
Y los lunares amplios de nuestra soledad
que no llenan su cuerpo.
Te fijas sólo en cosas
que la belleza incluso empeora,
como hieren las uñas
gigantes que nos salvan.
En fin,
no me entusiasma
tu terco cromatismo;
no me entusiasma.
Porque no sólo hay besos
pintados sobre bocas
trazadas a retazos
y domingos feriales
con radiantes carpas.
También el negro
que aíslas como un paria en la paleta
por miedo a que enturbie
tu arcoiris celeste
te cierra los párpados cuando lloras
porque un color te falla.
Y te vas.
Y olvidas.
Y siempre esa sonrisa
angustiosamente ocre...
¿Por qué este gris?
¿No hay suficiente con el negro
del kilométrico alquitrán bajo tu blanco?
¿El azul de los pañuelos
envueltos en las yemas de tu blanco?
¿El marrón de las maletas
temblando en las argollas de tu blanco?
La tristeza multicolor
de no ubicarte...
La tragedia en blanco y negro de ser luz
entumecida en tus pupilas
de un color no descubierto.
[H&C]
Mi infancia y su perfume a pájaro acariciado.
La que canta para no llorar.
http://www.youtube.com/watch?v=k5B9F7lRwPo
Busco y comparto amanecer.
1 comentario:
A mi me duele, por mucho que me digas tranquila cariño.
Por lo demás, deberías dolerme más a menudo. Todas las vanguardistadas que hago/digo se merecen un poquito de karma.
Karma, quillo, karma. Er soul zale aquín iguar que allín. Y es un p*to bus.
Poersona.
(Y que me sobra todo lo que va después...)
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